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sábado, 18 de agosto de 2012

La ecuación

                                                                               


Somos cápsulas de tiempo columpiándonos en la cornucopia cósmica. la velocidad con la que viajamos la determina la hipotética materia oscura, ya que en el infinito no existe la fricción, solo la gravedad.  Shumos trashumantes. 

La carga que transportamos a través del universo es información, y a pesar de que el contenedor está repleto de agujeros, aun así arribamos a nuestro destino con el embalaje preciso, correspondiente, después de haber navegado por subafluentes llenos de afluentes aventurados, comprometidos, sin destinos 
reales.  

Quizá fue un error haberle avisado, los genios no duran mucho porque sus cápsulas se consumen a gran velocidad.  Las conclusiones siguieron siendo las mismas acerca del instante pero con mucha más determinación.  

Se detuvo, literalmente.  Con lo cual, consiguió lo que tanto había escudriñado durante toda su vida, llevar a término la ecuación.

Por mi parte no alcancé más que a dejar esta nota, ya que el logro de las empresas de algunos recae en el fallo de otros.  Y con esto no busco lavarme las manos, simplemente quiero dejar evidencia, apelando a mi último recurso.

Cumplidos los trece cruzó los linderos.  Cómo lo consiguió nunca lo sabré y aun sabiéndolo no habría posibilidad de explicación.  En mis conjeturas puedo sugerir puertas en las dimensiones del tiempo, algo así como fronteras invisibles que guardan las cápsulas con las que transitamos nuestras encomiendas.  

La solución al problema era simple pero muy complicada la ecuación, un aliciente lo bastante poderoso para alimentar el ego de cualquiera, querer detener el tiempo; sin embargo, no disfrutó el ambivalente resultado obtenido, nadie lo hizo, ya que al cruzar la frontera del tiempo se llevó con él todo lo creado desde el momento del big bang. 

Al detener ese segundo infinito, necesario para alcanzar toda la ventaja que nos lleva el tiempo, ahí quedó todo congelado...  Para siempre.

Encontró la nada buscando la eternidad.  Nos llevó a todos.  Nos hizo parte de su experimento arrastrándonos con su ego.  Romper la cadena significó arribar a la invariabilidad, quedar inertes, como en una fotografía, sin poder dar marcha atrás.



Carlos Humberto Barillas Niederheitmann.http://www.youtube.com/watch?v=GKkeDqJBlK8

28 comentarios:

  1. Hola carlos, soy anna del blog romance.
    Me gustó mucho tu huella en mi blog, me agrada que pases y te empapes de mis letras. Para nada lo veo un atrevimiento. Mis puertas estan abiertas a tus comentarios y visitas. Yo igualmente me pasaré por tu lugar. Escribes muy bien.
    Un beso

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    1. Hola Anna, y muchas gracias por darte una vuelta. Allá me verás en tu blog... De las misma manera, las puertas de este blog están abiertas para ti. Es un honor.

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  2. Ecuaciones, destinos, infinitos, egos... Un maremagnum donde todo es posible según te enfoques.

    "Encontró la nada buscando la eternidad"... qué gran frase, Carlos.

    Besos

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    1. Gracias Verónica, pero lo peor de todo es que nos arrastró, según el relato. :)

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  3. Cuando vamos buscando lo infinito, y dejamos que el tiempo domine nuestros destinos, arrastramos a nuestro paso todo aquello que se nos cruza por delante.
    Al sucumbir en el caos, y aprendiendo a rozar el tiempo detenido en su infinitud, regresamos al vacío, del que llegamos.

    Besos, Carlos.

    P.S. Una delicada pluma, me condujo hasta aquí...

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  4. El infinito puede ser un estado de conciencia, materialmente imposible de alcanzar... Nos lleva mucha ventaja, no en fragmentos de tiempo sino en evolución. Ese vacío del que hemos partido, es una incógnita fascinante que bien vale la pena investigar.

    Gracias por tu comentario, profundo y analítico.

    Besos, Zarzamora.

    P.S.

    Esa misma pluma, me habló de ti. Mi querida madre.

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  5. El tiempo es una ecuación incierta, no sabemos a dónde nos puede llevar su solución, ni cuándo tendremos el resultado final.

    Me encanta tu blog, Carlos, y te agradezco tus huellas en el mío, y en entradas de hace tiempo.

    Ya tenía tu blog enlazado en mi lista de blogs, pero ahora lo he puesto como seguidor, y aunque te tengo en el Reader, no salgo aquí en tu lista de seguidores, es que va fatal últimamente blogger.

    Bueno, lo que importa, es que no pienso perder tu blog de vista.

    Un beso.

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  6. Gracias Maria, si tuvieramos la solución de esta ecuación, ya todo sería muy monótono. Creo que una de las hormonas que nos mantiene vivos es la adrenalína, y aunque produce estrés también nos relaja. Esa incógnita del mañana le da un gran sabor a la vida.

    A mí si me apareces en la lista de seguidores y cada vez que publicas algo en tu blog, me llega como recomendación de lectura. Voy y lo leo.

    Un beso.

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  7. Me gustó esta entrada, es como el deslinde, la exposición personalizada y perfecta de una respuesta que si no recuerdo mal diste a mi comentario en una entrada anterior. No sabría decir cual, porque he estado unos dias fuera, pero recuerdo aquel comentario de congelar el tiempo y quedarnos inertes como en una fotografía, algo bastante negativo, dicho sea de paso.

    Esta, además intenta encontrar la fórmula para adelantarse al tiempo, para evitar el colapso del infinito o el arrojo del big bang por ejemplo.
    Buscar el infinito, es tan imposible como encontrar la fórmula y resolver la ecuación del detener el tiempo.

    Muy buenas tus entradas!
    Eres todo un descubrimiento!! me alegra haber llegado hasta aquí.

    Besitos mediterráneos.

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  8. Hola Gala, me da gusto verte nuevamente. Tienes toda la razón, está entrada nación en ese momento en el que me dejaste tu comentario. No hace mucho de eso, fue en la entrada anterior "Eternidad", y es el resultado de lo que yo considero, una de las consecuencias de encontrar esa ecuación que nos lleve a detener el tiempo. A mi parecer algo catastófico, incluso peor, mucho peor que apagar una vela en absoluta oscuridad y sin una llama para volver a prenderla (escenario que aun presenta una posibilidad) pero, detener el tiempo, en ese momento todo acabaría. Pensarlo produce una sensación extraña, deficil de definir.

    Gracias nuevamente por tus comentarios, creeme que los valoro bastante...

    Besos angelinos. :)

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  9. Hola Gala, me da gusto verte nuevamente. Tienes toda la razón, está entrada nación en ese momento en el que me dejaste tu comentario. No hace mucho de eso, fue en la entrada anterior "Eternidad", y es el resultado de lo que yo considero, una de las consecuencias de encontrar esa ecuación que nos lleve a detener el tiempo. A mi parecer algo catastófico, incluso peor, mucho peor que apagar una vela en absoluta oscuridad y sin una llama para volver a prenderla (escenario que aun presenta una posibilidad) pero, detener el tiempo, en ese momento todo acabaría. Pensarlo produce una sensación extraña, deficil de definir.

    Gracias nuevamente por tus comentarios, creeme que los valoro bastante...

    Besos angelinos. :)

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  10. Respuestas
    1. Sin fin, esa es la matemática... Y según lo define la Real Academia, "Ciencia deductiva que estudia las propiedades de los entes abstractos, como números, figuras geométricas o símbolos, y sus relaciones". De cualquier manera, cuando se conoció el valor del 0, todo cambió.

      Saludos, Joaquin y gracias.

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  11. Espléndida entrada mi felicitación

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  12. Ni aun la gravedad, leve soplo, existe en ese nutrido cosmos del que cualquier pieza ha de fundirse sin fricción ni rozamiento.
    Nada de nada
    Nada por imaginarlo todo.
    Sigamos con la ecuación cuya solución siempre tiende a infinito.
    Primero habrá que definir qué es tiempo. Y si 'es' porque es susceptible de medirse o si 'no es', pues dependerá de que se le ajuste una medida arbiraria.
    Pero tu relato no pierde ápice de interés. Al contrario, atrae y es a la mente lo que al hierro el imán.
    Por todo ello, porque da gusto lucubrar teorías leyéndote, muchas gracias, y enorme abrazo.

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    1. Pilar me gusta tu comentario, como bien te dije anteriormente, le das la extensión que hace falta a los vacíos inebiltables de todo relato. El tiempo es en verdad un tema del cual se podrían sacar tratados muy extenson y que al final, tendería al infinito.

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  13. Una genial entrada, me ha gustado mucho. Enhorabuena

    un saludo

    fus

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    1. Gracias Fus. Me he reído con tu foto pues tiene un reloj... Enhorabuena.

      Un saludo.

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    2. Gracias Fus. Me he reído con tu foto pues tiene un reloj... Enhorabuena.

      Un saludo.

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  14. El infinito es un lugar en el pensamiento, insalvable, y nigún camino nos llevará allí. Buenas reflexiones.

    Un saludo desde Jaén.

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    1. A veces viendo al cielo, sin importar la hora, pienso en que una de las razones por las que fuimos creados, fue para que el universo pudiera entenderse a sí mismo. El infinito es un lugar en el pensamiento... Una gran frase que comparto.

      Gacias y un abrazo.

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  15. uff! me voy pensando mucho, en busqueda de un trecho.

    Saludos.

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    1. Aquí hay un trillo por el que puedes andar... En todo caso, es además de un placer poder compartir contigo, un honor que tus pasos te hayan traído hasta aquí.

      Gracias y un abrazo.

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  16. Un texto para releer y repensar-se

    Besos, Carlos

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Agradezco tus comentarios.